El Seguro de Vida en Palabras Sencillas

Seguros

Escuchamos constantemente el término “seguro de vida”. Sabemos que los bancos lo exigen como requisito para aprobación de préstamos bancarios, pero ¿qué más sabemos de esta importante herramienta financiera? 

Por naturaleza, la razón principal del seguro de vida es pagar una suma de dinero a los familiares del asegurado o titular de la póliza, por razón de su fallecimiento.  La intención es dejar un patrimonio a esos familiares o seres queridos, para cubrir los gastos funerarios, gastos de vivienda, costos de educación, cancelar deudas, apoyar en el plan de jubilación de la pareja y otros diversos gastos que pueden causar un estrés financiero debido a su ausencia. Esta modalidad es la conocida como seguros de vida temporales o a término y se contratan por una vigencia y suma asegurada fija.

Este tipo de seguro ha ido evolucionando, por lo que ahora existen productos con beneficios a los que el asegurado o titular tiene acceso  en vida, o sea que ya no es requisito que fallezca, para gozar de algunas de las coberturas. Estos son los conocidos como vida universal, que incluyen una modalidad de ahorro, normalmente con interés garantizado, importante para la planificación financiera, comúnmente utilizados para la educación de los hijos y/o jubilación. Este tipo de producto, a diferencia del anterior, se puede modificar en el tiempo, extendiendo su vigencia, aumentando la suma asegurada y fondo de ahorro, adaptándose a las necesidades de los titulares y sus realidades a medida van cambiando en el transcurso de sus vidas. 

Algo de imprescindible conocimiento es que la prima del seguro de vida es más económica, mientras más joven lo compramos.  Esto porque la tarifa se aplica en base a una tabla de mortalidad – en pocas palabras, mientras más cerca estás de la muerte según tu perfil de edad, más se encarece el producto.  También es importante estar lo más saludable posible, para evitar recargos o rechazos.  Podría inclusive un banco declinar un préstamo por falta de asegurabilidad en vida.

 Por lo anterior, comprar un seguro de vida universal, estando joven y en buen estado de salud, es una decisión de la cual no te vas a arrepentir.  Recuerda que este seguro es flexible y lo puedes ir modificando en el tiempo, a medida que vas adquiriendo responsabilidades financieras y/o dependientes.  Sin embargo, si ya tienes más edad, igual puedes comprar este seguro y aconsejo comprarlo cuanto antes. Un hecho que es certero para todos y digno de reflexión, es que el tiempo pasa y la muerte es el destino final, sin embargo, lo que no es certero es la fecha de su ocurrencia, ni la forma en que se dará, por tal motivo, debemos anteponernos a esta situación y asegurar ese futuro, para nuestra tranquilidad y la de nuestros seres queridos.

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